martes, 5 de agosto de 2008

La nostalgia de los pingüinos.

Hace tiempo me regalaron un libro llamado La nostalgia de los pingüinos. Es un libro de fotografías realizadas por el austríaco Willy Puchner. Se trata de una parejita de pingüinos (Joe y Sally) que deciden recorrer el planeta como si fueran unos turistas más. Los pingüinos son de mentira, y el fotógrafo carga con ellos haciéndoles fotos en diferentes lugares del mundo. Esto es muy subjetivo, pero a mí estas fotos me generan una melancolía y una ternura enormes.



Me gustaría ser uno de ellos. Viajar por el mundo sin prisas. A ser posible acompañado. Estar en sitios solitarios. Tener una mirada curiosa y receptiva ante todo: lo colosal y lo cotidiano. Lo malo de ver libros de fotografías de viajes es que provocan que me ponga tenso cuando llego a casa y veo mi mochila abandonada en una esquina. (Por cierto, algún día hablaré sobre mi mochila verde boomerang, que me la compré en el 94 para ir a Kenia y que el año pasado cuando fui a Etiopia cumplió 13 años de servicio sin un descosido y aguantando un tute que no veas)

Pero hay que desmitificar un poco. El proyecto del fotografo austríaco es muy divertido, original, tierno, etc... Pero menudo coñazo debe ser dar la vuelta al mundo con los dos bichos estos colgados a la espalda.



Es evidente que, aunque esten bien estas fotos, todos hemos visto fotógrafos mejores. Lo que no había visto hasta ahora es un cuaderno de viaje tan bonito como el que hace Willy Puchner. ¡Qué envidia!



6 comentarios:

Tessi dijo...

Me ha venido a la cabeza la pelicula Amelie y los enanitos de su padre "viajando" por todo el mundo :)

chuikov dijo...

Este libro es anterior a Amelie. Quizás se inspiraron en el libro.

Música dijo...

si os gustó Amelie, os recomiendo Odette, preciosa

Pi dijo...

La diferencia entre el enano de amelie y los pingüinos de tu libro es que las fotos parecen pensadas también por ellos. Son fotos de una pareja de viaje, eso es lo lindo, lo que, creo, despierta ternura y melancolía. Siempre quise colgar el póster que venía en el interior.
Si además escuchas a la Penguin Cafe Orchestra, ahí sí que dan ganas de llorar, o de hacer la mochila y escaparse como ellos.
Y qué pedazo de diario. Qué envidia. Pero nosotros tenemos blog! jejejej

Anónimo dijo...

Chuikov,
en su día os escribí para que os apuntáseis al casting de Pekin Express, tú y Sheahan habríais sido una pareja estupenda de concursantes. Ayer me pasaron el primer programa (estrenamos en septiembre), está genial, lo habríais pasado genial e incluso apuesto por vosotros como ganadores.
No descartes la segunda edición.
besos

chuikov dijo...

Ok. Pues nada gracias por verme como candidato. Yo por mí encantado de participar.