miércoles, 3 de diciembre de 2008

Ligue casual telefónico II

La casualidad telefónica de anteayer me sirve para recordar otro suceso similar ocurrido hace un año. Había entrevistado a una chica brasileña para ser dependienta de mi tienda. No me gustó y decidí llamarla para decírselo. No encontraba su teléfono y pensé que recordaría su número de memoria.

Yo: hola, mira soy x de la tienda x. Quisiera hablar con x.
Ella: (con acento brasileño) ¿Para qué era?
Y: ¿Eres tú?
Ella: ¿de qué se trata?
Y: pues verás es sobre la entrevista de trabajo que le hice. ¿Eres su amiga?
Ella: yo soy brasileña y estoy buscando trabajo, quizás me entrevistaste a mí. ¿Dónde está la tienda?
Y: Segovia.
Ella: No. Yo soy de Barcelona y no conozco a esa chica.

Joder, 5 minutos de diálogo de besugos para decirme que me había equivocado. La casualidad de que también fuera brasileña me dejó un poco bloqueado. Pero la conversación siguió. Me preguntó que de qué era la tienda, me dijo que era una pena porque ella estaba buscando trabajo entre semana. Me dijo que le caía bien, me contó que era bailarina y que trabajaba en un bar del puerto de Barcelona (famoso porque las camareras son espectaculares, bailan en la barra, etc...) Tras ese dato obviamente la conversación se puso muyyyy interesante.
Tras dos horas de teléfono sabía: que tenía 37 años, que usaba una 95, que los implantes mamarios suyos eran intramusculares con lo que sus tetas parecían naturales, que su anterior novio era un cabrón, que tenía un hijo de 15 años, que llevaba 3 meses sin un revolcón, que su mejor amigo tenía pilas y era de látex, etc, etc, etc.Estuvimos hablando intermitentemente durante una semana. Pero lo que empezó siendo una casualidad morbosa se convirtió en una narración de secuencias vitales (y sexuales) que se volvieron pelín aburridas y repetitivas. Me invitó a ir a Barcelona.

La gente está muy sola.

9 comentarios:

Música dijo...

hijo, lo tuyo es un imán, a mí como mucho algún que otro ex novio, ex rollete o ex piedra de mechero que me mande un mje to tierno y luego me diga que se había equivocado....arggggggg

Pi dijo...

La gente está muy sola y quiere vivir historias. Yo estoy "desarrollando" una teoría sobre lo complicado que es "saber estar" en el mundo ese de los sentimientos: que si puedes parecer tal y cual, si haces o dejas de hacer, que si una estrategia, que si al final no se es natural,etc.etc.etc. Demasiado complicado. En fin.

Anónimo dijo...

Lo tuyo es fuerte, me vas a tener que explicar como lo haces!!

Pecosa dijo...

Si es que todo lo que empieza tan tan morboso y tan tan intenso (brasileña, silicona, bailes en barras, látex...) cansa en seguida. Mejor al revés: una chica normalita que te vaya sorprendiendo con el día a día...

... ¿Has llamado a la de Salamanca?

chuikov dijo...

llevas razón pecosa. brasileña, mulata, bailarina, son conceptos que inevitablemente atraen. son clichés que a uno le despiertan todo. pero una blanca, que no sepa bailar y de badajoz puede ser más atractiva. esta al final cansaba bastante. porque todo era tan rápido y tan "intenso" que parecía ficticio.
y sobre anónimo y música, sólo puedo decir que es una mezcla de un 40% de casualidad, un 30% de receptividad, un 15% de curiosidad y un 15% de que quizás de confianza a la gente. no se muy bien el motivo pero aún siendo un desconocido la gente me cuenta su vida. y como la gente quiere que les escuches...

chuikov dijo...

ahhh, llevo dos años sin ir a barcelona, y de momento, no pienso ir a salamamca

Anónimo dijo...

Como dicen por mi barrio:
'A fame é negra'
Traducción: 'El hambre es negra'. Pero a mí me gusta más en gallego.

chuikov dijo...

por mi casa dicen, "a fame e moito mala", jajja

Mery Fence dijo...

jaja pensaba que era yo la única a la que le pasaban estas frikadas telefónicas. Recuerdo con horror cómo hace algunos años me llamó un sátiro a las 3 de la mañana para decirme guarradas (hardcore puro y duro), cuando le pregunté de dónde había sacado mi número me dijo que estaba apuntado ¡en el baño de los chicos de la facultad!jajaj. Grandes historias para grandes momentos.